Soñamos juntos en un nuevo orden para el  encuentro              donde reine la escucha y el diálogo

El QUÉ de la educomunicación

La educomunicación puede ser vista como el conjunto de fuerzas convergentes que valoran los procesos comunicativos en todo tipo de ambiente educativo, desde la intencionalidad que  reconoce la riqueza comunicación en la experiencia educativa, que favorece la construcción de auténticos ecosistemas comunicativos que fundamentan la formación de genuinos interlocutores sociales con liderazgo, comprometidos con la propia historia, sus retos y desafíos.

EL COMO de la educomunicación

El cómo de la educomunicación pasa por la opción consciente de ejercitar  de forma articulada con la experiencia educativa misma el Diálogo activo, escucha asertiva, trabajo colaborativo.

Requiere intencionalidad, compromiso, coherencia con aquello que se quiere compartir, partiendo de la necesidad explicita de escuchar la verdad del otro, darle voz a quien no la tiene, entenderlo en su contexto y abrirse a las diferencias, para acoger lo diferente que enriquece el argumento.

 Esta es la clave de la educomunicacion formar a la interlocución social, que fortalece pertenencia e identidad, que procura la interdisciplinariedad como posibilidad de diálogo que construye y promueve una mejor calidad de vida y relación desde el compromiso social y la identidad ciudadana, con la historia, con el entorno natural, con Dios y con los hermanos.,

 

 

EL PARA QUE de la educomunicación

La significatividad de los procesos depende sin lugar a duda de la capacidad de integrar miradas, de atreverse a dar espacio a lo diferente  a lo que no podemos manejar, esto es, a la necesidad de convergencia en vista al bien común.

Desde este principio de integralidad es posible asumir la educomunicación como estrategia prioritaria de encuentro, desde la diversidad de énfasis que la debieran sostener, educación - comunicación, pastoral, formación, para nosotras las prospectivas de referencia,  como tejido armónico de distintos enfoques que unifican la mirada en vista a la formación de la persona.

Desde aquí cobran sentido la formación en lo  social, evangelizadora, cultural, comunicativa, son énfasis, partes articuladas de un todo que las complementa, gestando auténticas interlocutoras sociales comprometidas con el hoy de la historia que las necesita.